No entiendo cómo es posible que se hagan programas de televisión al estilo Diario de. Presentado por Mercedes Milá en Telecinco, éste programa, dirigido y editado en un formato apto para causar alarma social, se usa de las víctimas y del dolor para sus fines: tener más audiencia y, si al mismo tiempo pueden denunciar alguna cosa, pues mejor que mejor. Su última emisión se llamaba Delincuentes al volante, en clara alusión a esos jóvenes inconscientes llenos de alcohol y drogas en la sangre que cogen el coche y atropellan a gente. Como si todos los jóvenes fuéramos igual…
Preguntas varias
No entiendo cómo es posible que los deportes de Cuatro, esencialmente -aunque empieza a ser una constante en diversas cadenas- alaguen, piropeen y hasta hagan campeona del mundial del año que viene a la selección española de fútbol. Las noticias de deportes están para explicar y interpretar los acontecimientos deportivos del día, no para engañar y soñar con que la roja vaya a ser campeona de un torneo que, de momento, no está ni clasificada.
No entiendo cómo es posible que la mayoría de cadenas -por no decir todas- se hayan unido a la política de la Sexta: poner una mujer guapa delante de la cámara para atraer a los espectadores aunque no sea apta para ello. Televisión de Catalunya lo hace con Laia Ferrer en la Fórmula 1, ahora, con la tan importante Copa Confederaciones, Telecinco lo hace con Sara Carbonero (después de su paso por la Sexta), dinámica a la que también se ha unido la cadena Cuatro, la 1 o Antena 3. Pese a todo, el cupo lo gana la Sexta con sus mujeres. No dudo del criterio y profesionalidad de ésas mujeres, simplemente advierto que parece que el criterio de informar/interpretar rigurosamente desvanece en frente al de poner mujeres atractivas por el simple hecho de atraer más audiencia.
L'espai de la comunicació 